Llega el momento, me piro.
Al filo de la mañana qué frío,
que no me he puesto el sayo
pero me he puesto como un rayo.
Me siento como un esperma esperando en un tubo de ensayo,
congelado pero vivo.
Se rompe el hielo si tiro un suspiro.
Que no hay nadie más por las calles.
Que yo sólo pienso en canciones.
Que una poesía me sale porque se me caen los pantalones.
Y es que se me escapa el aire.
[Estribillo:]
Porque me falta el aliento,
la fuerza, la pasta,
las ganas de verte,
el encanto, la salsa,
la luz de mis ojos,
mi as en la manga,
tus ojitos rojos,
me falta, me falta.
Me falta el aliento,
la fuerza, la pasta,
las ganas de verte,
el encanto, la salsa,
la luz de mis ojos,
mi as en la manga,
tus ojitos rojos
me faltan.
Madrugada de hielo.
Alguien que se arrastra a ras del suelo.
Ya debe entrar el sol
por tu ventana azul.
Y yo en el ascensor.
¡Qué cara, qué estúpida expresión!
Menos mal que ya no estás tú.
Tengo un reloj que se para
siempre que tú de mí te separas,
y anoche se paró a las dos.
Las dos nos separó a los dos.
Ya no hay tiempo que transcurra,
ni sudor, que se me escurra
por tu cuerpo, ahí donde curra
mi silencio,
mis manos, mi boca, mis ganas, mis besos,
mi cabeza loca, mis temas, mis sueños.
¿Te digo por qué?
[Estribillo] (x2)