Son de los dos
Las culpas y los muelles de alabastro
El dios del adiós
Les reza a los que creen en simulacros
De corazón, tenés razón
No hay música en el llanto de los hijos
El dios del adiós
Reside en laberintos infinitos
Revelación final:
Cuando no somos más
Indivisibles
(A veces)
Suma más
Restar