Estoy solo en la ciudad, esta noche pasará,
Como un coche sin luces en la niebla.
Bebo otro café, mientras pienso por qué,
Te perdí como agua entre la arena.
Pero no sé, si será mejor así, yo no lo sé.
Ahora veo que tú, con tu absurda actitud,
Por el suelo has tirado nuestra historia.
No sé que hacer con mis pedazos,
Ni donde está mi corazón.
Quizás se habrá quedado oculto en medio de,
Todo lo que te llevaste ayer.
Y en el este una luz
Inunda en un instante ya las cosas,
Todas las cosas.
De repente lloro y tú,
Eres una espina en esta rosa,
Espina en nuestra rosa.
Me pregunto si al amanecer,
Con un calor tan tímido,
Podrá aliviarme el frío y el dolor.
Podrá aliviarme el frío y el dolor.
No hay nada aquí, que no me recuerde a ti,
Un insecto a golpes contra el cristal.
Como tú buscará, allí afuera libertad,
Abro la ventana y echa a volar.
Imaginándote feliz no sé,
Quiero morir mas viviré.
Ya no hay rencor pero hay nostalgia todavía,
En el primer día que no estás.
Y en el este una luz
Inunda en un instante ya las cosas,
Todas las cosas.
De repente lloro y tú,
Eres una espina en esta rosa,
Espina en nuestra rosa.
Y en el este una luz
Inunda en un instante ya las cosas,
Todas las cosas.
De repente lloro y tú,
Eres una espina en esta rosa,
Espina en nuestra rosa.